mayo 22, 2018
Testimonio de experiencia quiropráctica. Ir al Centre Quiropràctic l’Olivera con Roser no es como ir a un doctor de cabecera y tener un diagnóstico genérico. Ella trata directamente al paciente como lo haría una buena amiga o una familiar cercana.
Antes no podía correr ni mucho menos caminar más de una hora sin tener dolor lumbar. Ahora puedo caminar sin dolor y empiezo a volver a correr cómoda.
Considero que todos deberíamos ir al quiropráctico para ponernos en orden por dentro.